Conoce a… Farmacéuticos Canarios Solidarios

La solidaridad de los farmacéuticos de la provincia de Las Palmas tenía que mirar hacia la realidad social de las islas orientales y sus intereses, es decir, no solo en el propio territorio sino que también a nivel internacional. Con esa actitud, un grupo importante de colegiados (cerca de 170) constituyeron Farmacéuticos Canarios Solidarios en el año 2004.

Hasta entonces, esa solidaridad se encauzaba a través de Farmacéuticos Mundi (FarmaMundi), pero parecía evidente que las necesidades que se descubrían desde este lado del Atlántico tenían características que apuntaban a otras prioridades, especialmente las locales, Venezuela, Cuba, Mauritania y Senegal.

Fue así como, liderados por José María Gómez Coll y Manuel García García, los profesionales farmacéuticos se unieron para atender estos puntos, aportando apósitos, vendas, guantes, medicamentos…

Para el actual presidente de FCS, Pedro Hernández Barbosa, “los farmacéuticos nos dimos cuenta de que materiales que aquí no tenían trascendencia, en otros sitios, incluso de la misma provincia, podían servir para salvar vidas o, al menos, mejorar la calidad de vida de las personas”.

No se tardó mucho en comprender que la buena voluntad no bastaba para que los materiales recalaran en su destino. Por eso se asumió la necesidad de colaborar con otras ONG e instituciones que sí contaban con medios logísticos suficientes para afrontar el transporte de los materiales que FCS iba consiguiendo y, en la mayoría de los casos, comprando a COFARCA a medida que se descubrían las necesidades de cada momento.

Desde entonces hasta hoy son muchos los retos afrontados. Desde la guerra en Ruanda hasta el actual conflicto en Ucrania, pasando por la colaboración en la reconstrucción de un hospital en Mozambique tras el terremoto de 2006, en colaboración con la ULPGC. Estas han sido actuaciones esporádicas que se han afrontado desde la organización, pero también hay otras de carácter permanente: son los casos de ayuda a Cuba, Venezuela y Mauritania, especialmente con médicos isleños que acuden a estos destinos a realizar labores de voluntariado y colaboración en hospitales y centros sanitarios.

“Creo”, señala Hernández Barbosa, “que la sociedad no nos ve como una organización que gestiona ayuda, más bien se nos ve como algo organizado por un colectivo profesional económicamente  poderoso, aunque esto no sea cierto. Por eso”, afirma, “es tan importante contar con la colaboración de los compañeros, ya que nacimos para encauzar la solidaridad a través de lo que mejor conocemos, que es el mundo sanitario en general, y el medicamento en particular”.

En este sentido anuncia que “en breve se pondrá en marcha una campaña para la captación de nuevos socios”, y añade que “la participación de los farmacéuticos es vital en nuestro proyecto, no solo con aportaciones económicas, también con la participación directa aplicando su conocimiento”.

Para hacerse socio de Farmacéuticos Canarios Solidarios basta con darse de alta y pagar una cuota de seis euros mensuales, que puede pagarse por domiciliación bancaria, o por la facturación en el COFLP (36 en enero y 36 en julio) si se es titular de oficina de farmacia.